El Aconcagua, la montaña más alta del doble continente americano, no es una de las figuras montañosas más impresionantes de América del Sur, a pesar de sus 6958 metros. No es un volcán, por lo que carece de elegantes laderas. La alta sequedad del aire y el efecto del viento impiden la formación de una capa de hielo en la cima, pero existen cinco pequeños glaciares de pendiente. La montaña, ubicada en la zona fronteriza entre Argentina y Chile de la Alta Cordillera, fue escalada por primera vez en 1897 por el suizo M. Zurbriggen. - 1975
El Aconcagua, la montaña más alta del doble continente americano, no es una de las figuras montañosas más impresionantes de América del Sur, a pesar de sus 6958 metros. No es un volcán, por lo que carece de elegantes laderas. La alta sequedad del aire y el efecto del viento impiden la formación de una capa de hielo en la cima, pero existen cinco pequeños glaciares de pendiente. La montaña, ubicada en la zona fronteriza entre Argentina y Chile de la Alta Cordillera, fue escalada por primera vez en 1897 por el suizo M. Zurbriggen. - 1975