4 resultados
Colorido manto sepulcro de una de las 429 momias principescas de Paracas-Necrópolis del primer siglo de nuestra era. El incomparable arte textil de los tejedores y bordadores deja muy en claro cuán profundamente arraigado estaba el culto de los trofeos de cabeza y las cabezas reducidas, que se usaban como corazas y colgantes. (Museo Nacional de Antropología y Arqueología, Lima, Perú)
En el apogeo de la cultura Tiahuanaco (siglos VIII - XII), su influencia se extendió por toda la costa peruana. La iconografía y el patrón de franjas escalonadas de este tiahuanacoide tejido de lana y algodón (115 x 58 cm) de Campanario (Huarmey) recuerdan a los extraños hombrecitos con alas y picos de cóndor en el dintel de la Puerta del Sol. (Museo Yoshitaro Amano, Lima, Perú)
Una de las pocas, si no la única tela que ha sobrevivido de la cultura Chavín: algodón pintado y nuevamente los familiares motivos de colmillos, serpientes de plumas y garras de cóndor. Museo Amano, Lima, Perú. - 1976
Detalle de un manto funerario de la cultura Paracas-Necrópolis con figuras humanas, abanicos y bastones ceremoniales en sus manos. Museo Nacional de Antropología y Arqueología, Lima, Perú. - 1977