En Cajamarca, a 2960 metros de altitud, Francisco Pizarro atrajo al Inca Atahualpa a una emboscada y lo capturó. Aún hoy día se exhibe la "Cámara de rescate", la habitación que Atahualpa había llenado de oro. Sin embargo, el rescate no lo salvó de una muerte violenta. Cajamarca ha conservado en gran medida su carácter colonial hasta el día de hoy, y con sus 30.000 habitantes es una ciudad comercial animada: pequeños agricultores haciendo cola para cobrar por su leche frente a la cooperativa agrícola. - 1976
En Cajamarca, a 2960 metros de altitud, Francisco Pizarro atrajo al Inca Atahualpa a una emboscada y lo capturó. Aún hoy día se exhibe la "Cámara de rescate", la habitación que Atahualpa había llenado de oro. Sin embargo, el rescate no lo salvó de una muerte violenta. Cajamarca ha conservado en gran medida su carácter colonial hasta el día de hoy, y con sus 30.000 habitantes es una ciudad comercial animada: pequeños agricultores haciendo cola para cobrar por su leche frente a la cooperativa agrícola. - 1976